Por un instante aquella persona entró a mi mente y comence a temblar. No relacionaba lo feliz que me ponía cuando la imaginaba. Maldita sea! estaba yo enamorado y sin darme cuenta! game over, otra vez empiezas. Vaya broma. Pero que no minutos antes estaba pensando en otras cosas, menos en... eso?
Que sentimiento tan tonto y fugaz, es lo inesperado lo que me llama. Lo que significaria cambiar tu vida de un segundo a otro, dejar todo, sin siquiera pensarlo. Tantos minutos de reflexión se van por un caño cuando alguien te hace temblar.
El presente en su máxima expresión. El instante que produce lo arriesgado. La mirada tapizada con un sueño o pseudosueño, que te reta para hacerse realidad o volverte a sentar.
Todo esto sucede mientras una serie de mensajes son mandados por telefono, de los 3 mandados solo responde los 2 primeros, y es en la espera del tercero que me detuve. Ahí donde describo como es ese sentimiento tan raro que llaman enamorarse.
Trate de hacerlo lo más frio que pude, pero fué imposible, pues además de ser tonto, es inexplicablemente positivo. Tan estupidamente se pueden enmielar todas tus letras, ridiculizando a la poesia, como un desnudo inesperado que juega malabares y descuida su acto. Al volver a leer estas lineas trato de reir por lo débil que un conejo de 3 orejas puede ser.
Por un instante aquella persona entró a mi mente y comence a temblar. No relacionaba lo feliz que me ponía cuando la imaginaba. Maldita sea! estaba yo enamorado y sin darme cuenta! game over, otra vez empiezas. Vaya broma. Pero que no minutos antes estaba pensando en otras cosas, menos en... eso?
Que sentimiento tan tonto y fugaz, es lo inesperado lo que me llama. Lo que significaria cambiar tu vida de un segundo a otro, dejar todo, sin siquiera pensarlo. Tantos minutos de reflexión se van por un caño cuando alguien te hace temblar.
El presente en su máxima expresión. El instante que produce lo arriesgado. La mirada tapizada con un sueño o pseudosueño, que te reta para hacerse realidad o volverte a sentar.
Todo esto sucede mientras una serie de mensajes son mandados por telefono, de los 3 mandados solo responde los 2 primeros, y es en la espera del tercero que me detuve. Ahí donde describo como es ese sentimiento tan raro que llaman enamorarse.
Trate de hacerlo lo más frio que pude, pero fué imposible, pues además de ser tonto, es inexplicablemente positivo. Tan estupidamente se pueden enmielar todas tus letras, ridiculizando a la poesia, como un desnudo inesperado que juega malabares y descuida su acto. Al volver a leer estas lineas trato de reir por lo débil que un conejo de 3 orejas puede ser.
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